lunes, 29 de octubre de 2012

Estrés Crónico: Consecuencias Físicas, Mentales y Emocionales


La receta para el estrés (Parte 2)


La receta para el estrés - neurociencia


Los modelos de atención de la salud pública

1. concepto

El modelo es el conjunto de elementos esenciales que logra representar un aspecto de la realidad   y se l derivado de la teoría o de la vida  práctica.
Un modelo de atención en Salud es una de las modalidades mediante la cual los paradigmas del proceso de salud-enfermedad se implementan mediante prácticas sociales en  salud y asistencia.

Diversas teorías, desde las miasmáticas hasta las demográficas y los más variados modelos, desde los mecanicistas hasta los del bienestar, se han aplicado al estudio e intervención de la salud y la salud pública, campos en los que es reconocido históricamente dos  enfoques tradicionales de estudio y práctica: el biomédico y el socio-ecológico. Estos referentes paradigmáticos a su vez han sentado las bases para el desarrollo de propuestas originadas en las áreas biológicas, comportamentales y psicosociales, revelándose claramente con el aporte a la promoción de la salud de la población va más allá de lo individual e involucra incluso las formas de organización social y la política estructural de las naciones.
La salud de la población es el  eje central y básico de la salud pública  y esto incluye todos los aspectos de interés colectivo que contribuyen a mejorar o mantener la salud de la gente. Saber y hacer salud pública implica un campo de conocimientos y un campo de práctica susceptible de ser delimitado y estructurado, pues los conocimientos y estrategias requeridas para su ejercicio provienen de diversas disciplinas, articuladas en función de su objetivo.

2. Las propuestas de atención en salud

Las propuestas se agrupan en tres grandes bloques:

2.1. Las del comportamientos individuales: se pueden señalar dos modelos como muy representativos por el impacto y aportes históricos en el campo así como por estar masivamente diseminados y validados en múltiples contextos: el de creencias en salud y el transteórico del cambio de comportamiento; y dos teorías: la de la acción razonada y la del comportamiento planeado.

2.2. Las interpersonales o grupales: explican y facilitan la intervención e investigación de fenómenos interpersonales se destacan la relevancia de aportes generados por las teorías cognitivo social, la de soporte social en redes y la de comunicación paciente-proveedor.

La relación entre salud y enfermedad

Aunque los conceptos de salud y enfermedad son generalmente vistos como opuestos que constituyen una “pareja de valor” sus relaciones pueden contemplarse desde diferentes perspectivas. A fin de no dar por supuestas cuestiones que por su obvia apariencia generan posteriores problemas de interpretación, en este epígrafe se tratan los diferentes modelos de relación entre salud y enfermedad, sus características y sus limitaciones.
 
El modelo ideal: salud como ausencia de enfermedad
 
El modelo más sencillo de relación entre los dos conceptos es el ya apuntado de la salud entendida como ausencia de enfermedad. Siguiendo a Hofmann llamaremos a éste el modelo ideal. En él, si estás sano no padeces ninguna enfermedad, y recíprocamente, si estás enfermo no puedes estar sano. El modelo ideal es el prevalente entre los profesionales de la salud. Las enfermedades son desarreglos de las estructuras o las funciones de algunas partes de cuerpo humano. En ausencia de estos desarreglos, la situación es de salud. Se cree que un manual de anatomía o psicología es una imagen de la salud humana. La normalidad es la ausencia de alteraciones. El carácter anómalo de la enfermedad se expresa en el lenguaje ordinario, cuando se habla de dis-función, des-orden, dis-capacidad, etc. En inglés uno de los términos más comunes para referirse a la enfermedad es dis-ease, algo bastante parecido a nuestro “mal-estar”. En tal sentido, ya afirmaba Aristóteles en su “Metafísica” que la enfermedad existe por la ausencia de salud.
El modelo ideal plantea algunos problemas cuando se enfrenta con personas o situaciones que no responden estrictamente a la enfermedad, pero que obviamente tampoco son sanas. En la asistencia sanitaria es frecuente encontrar individuos que sufren “síntomas” molestos o dolorosos, pero a los que no se les puede identificar que padezcan una enfermedad concreta. Es decir, la ausencia de enfermedad no implica automáticamente que una persona esté sana.
 
El modelo global: salud como más que ausencia de enfermedad
 
Un modo de superar la paradoja señalada pasa por introducir un nuevo modelo que entienda que la salud es más que la mera ausencia de enfermedad. La definición de salud de la OMS, es un claro ejemplo de la aplicación de ese modelo. Introduciendo criterios de salud que van más allá de la ausencia de enfermedad - como bienestar, felicidad, capacidad de logros vitales, etc. – la ausencia de enfermedad es una condición necesaria, pero no suficiente, para gozar de salud. En este modelo es perfectamente compatible no padecer una enfermedad y no disfrutar de salud al mismo tiempo. De esta manera puede explicarse que la ausencia de enfermedad identificada no signifique un estado saludable.
Sin embargo también existen algunas dificultades implícitas en esta concepción. Cabe encontrar individuos que según las definiciones propuestas no están sanos, pero para los que no se puede identificar una enfermedad. Ni el modelo tradicional ni el global son adecuados para enfrentarse a situaciones en las que la ausencia de salud no implique enfermedad. Surge la necesidad de ensayar otra perspectiva, representada por el modelo médico.
 
El modelo médico: Enfermedad como más que ausencia de salud
 
En este modelo de relaciones entre la salud y la enfermedad la enfermedad es algo más que la ausencia de salud. Para estar enfermo se requiere cumplir algunos criterios además del de no estar sano. En general estos criterios suelen ser que la enfermedad haya sido detectada e identificada de acuerdo con algunos métodos normalizados, como pruebas diagnósticas o exploraciones médicas. De este modo sólo se está enfermo si la enfermedad es identificable médicamente.
El modelo médico afirma que la falta de salud no es una condición suficiente para estar enfermo. Por tanto es posible estar al mismo tiempo no sano y no enfermo. Lo relevante es que destaca la existencia de criterios médicos para delimitar lo que es la enfermedad que son más estrictos que los existentes para la falta de salud. Una enfermedad concreta es el modo en que abstraemos conceptualmente una variedad de fenómenos: alteraciones orgánicas, percepción de sufrimiento o incomodidad, reconocimiento social del carácter patológico de ese acontecimiento, etc.
La enfermedad se define por sus manifestaciones objetivables, pero también por su encaje en nuestros conocimientos sobre el funcionamiento de los organismos. El diagnóstico de una enfermedad es el encaje de unas vivencias en alguna de las categorías que la ciencia ha ido construyendo como arquetipos patológicos, lo que Sydenham llamaba “especies morbosas”. En toda enfermedad confluyen percepciones subjetivas, etiquetados en categorías tecnológicas y reconocimiento social del proceso. Cuando falla alguna de éstas, puede darse que el individuo no se sienta bien, pero no seamos capaces de incluirlo en ninguno de nuestros modelos de enfermedad. Así, la ausencia de enfermedad – dado que su reconocimiento depende de una construcción “tecnológica” – no implica forzosamente que el individuo esté sano.
 
Limitaciones de nuestros modelos de salud y enfermedad
Tanto el modelo médico como el modelo global explican situaciones que desafían al modelo ideal. Ambos explican la situación en la que alguien no está ni enfermo ni sano. Pero ni el modelo médico ni el modelo global pueden dar cuenta de las situaciones en las que se presentan simultáneamente la salud y la enfermedad. Para entenderlo es preciso reparar en que el modelo ideal presupone que la salud y la enfermedad son dos conceptos excluyentes y exhaustivos. Sin embargo, el modelo médico y el global asumen la condición de exclusividad, pero no la exhaustividad.
Todo lo anterior puede parecer innecesariamente abstracto si no se aplica a nuestras dudas actuales sobre la necesidad de redefinición de conceptos cuyo significado hemos ido desplazando en el curso del tiempo. Un sencillo ejemplo puede ayudar a entender las implicaciones de las distintas construcciones sobre la salud y la enfermedad. Un individuo que no experimenta ninguna molestia, malestar o restricción, pero que obtiene un resultado positivo ante una prueba genética ¿está o no sano? La respuesta a esta sencilla pregunta depende en buena medida del modelo de conceptualización que apliquemos.
Estas situaciones no son siempre resolubles con la aplicación de los modelos vistos. Una razón para ello es que todos consideran la salud y la enfermedad como conceptos independientes. Para entender los casos que escapan a la concepción general no se pueden definir de manera reciproca las nociones de salud y enfermedad. Para ello necesitamos superar esquemas clásicos y considerar la salud y la enfermedad como contrarias, pero parcialmente independientes.

domingo, 28 de octubre de 2012

Influencia del estrés ocupacional en el proceso salud- enfermedad

Influencia del estrés ocupacional en el proceso salud- enfermedad

Resumen

La salud ocupacional o higiene ocupacional tiene como finalidad promover y mantener el más alto grado de bienestar físico, mental y social de los trabajadores en todas las profesiones. En la revisión bibliográfica realizada se puede apreciar que los conflictos psicológicos y la inadaptación del hombre al trabajo son capaces de generar estados de ánimos negativos, desequilibrios emocionales y otros malestares que afectan no solo a la salud mental, sino también el funcionamiento neurovegetativo del organismo. Es por ello que uno de los problemas relacionados con el binomio salud-enfermedad que más ha llamado la atención de los investigadores en los últimos 20 años es el tema del estrés ocupacional. La actividad laboral constituye una de las fuentes de bienestar psicológico y social más valiosa para los seres humanos y provee la mayor parte del significado y estructura del adulto, como lo afirman numerosos autores. Las investigaciones refieren que en sus consecuencias se deben contemplar la dualidad de sus efectos sobre la salud y el bienestar. El presente trabajo permite abordar nuevos criterios sobre los factores psicosociales que intervienen en el área laboral y su repercusión en la salud del trabajador, así como introducirse en la búsqueda de nuevas herramientas diagnósticas para trabajos futuros.
DeCS: SALUD OCUPACIONAL; ESTRES PSICOLOGICO; CONDICIONES DE TRABAJO; PROCESO SALUD- ENFERMEDAD.
Dentro de las especialidades de la psicología que se insertan en el campo de la salud, se encuentra la ocupacional, llamada también ergonomía, que se ocupa de problemas tales como las formas de equiparar las capacidades de los individuos con los requisitos de los empleos, mediante una selección adecuada y métodos de capacitación, así como del diseño de los empleos y las condiciones ambientales para hacerlas corresponder con las capacidades humanas. Un aspecto importante de la psicología ocupacional es la reducción de los accidentes y el estrés en el lugar de trabajo.
Los estudios de lesiones ocupacionales y enfermedades se han dirigido casi exclusivamente al costo económico directo y a la duración de la incapacidad, raramente se le ha prestado atención a sus amplias consecuencias sociales o a su impacto en la familia de esos trabajadores.1-4 La salud ocupacional tiene como finalidad promover y mantener el más alto grado de bienestar físico, mental y social de los trabajadores en todas las profesiones. Los conflictos psicológicos y la inadaptación del hombre al trabajo son capaces de generar estados de ánimos negativos, desequilibrios emocionales y otros malestares que afectan no solo a la salud mental, sino también el funcionamiento vegetativo del organismo.5,6 Es por ello que uno de los problemas relacionados con el binomio salud-enfermedad que más ha llamado la atención de los investigadores en los últimos 20 años es el tema del estrés ocupacional.7

Efectos negativos del estrés ocupacional en la salud del trabajador
El término estrés está muy presente en el hombre de nuestros días, y aunque existen múltiples criterios relacionados con su enunciado, forma de medirlo y sobre todo en los métodos de lucha contra él, todos coinciden en concederle una extraordinaria importancia, por las consecuencias que ocasiona a la salud humana este complejo fenómeno.7-10 Desde tiempos muy remotos las repercusiones que posee el estrés en la salud son innumerables, por citar algunas podemos mencionar que en los EE.UU. las enfermedades vinculadas con el estrés, junto con las vasculares cerebrales constituían el 50 % de las causas de muerte.8,9 En la antigua URSS, la mortalidad por esta enfermedad se incrementó en 4 veces de 1960 a 1980.8-10 Los famosos hermanos Mayo declararon que más de la mitad de las camas de los hospitales de los EE.UU. estaban ocupadas por personas con padecimientos del estrés.11,12
Los problemas del estudio del estrés y su impacto en la salud del trabajador, representan una dirección obligada cuando se intenta elevar los niveles de salud de una población determinada, por lo tanto incidir en su calidad de vida, es tarea fundamental de todo profesional que se encargue de la salud ocupacional.13 Existen múltiples razones que justifican esto, pero fundamentalmente que el trabajo representa la actividad vital más importante para el hombre y su desarrollo social.14 Es conocido que además de satisfacer sus necesidades económicas y de supervivencia, es fundamental para el desarrollo de una personalidad armónica. Los estudios sobre el estado de salud de los desempleados apoyan esta afirmación.15
No es difícil imaginar que las acciones desarrolladas con la intención de mejorar los índices de salud del trabajador, identificar las fuentes que atentan contra estos, prevenirlas en general, adecuar cada vez más la relación hombre-actividad laboral, debe convertirse en uno de los propósitos más importantes de la salud pública.15-17 El trabajo constituye una de las fuentes de bienestar psicológico y social más valiosa para los seres humanos y provee la mayor parte del significado y estructura del adulto. Sus consecuencias sobre los seres humanos son ambientales, producen salud y bienestar, a la vez que enfermedad, muerte e insatisfacción. Las investigaciones relativas a sus consecuencias deben contemplar, por tanto, la dualidad de sus efectos sobre la salud y el bienestar y las formas en que puede matar al espíritu humano.18,19 Particularizando en los problemas de la capacidad de trabajo, generalmente afectadas en las profesiones con alta responsabilidad, se comprobó que las alteraciones se producen por una extenuación de neurodinamismo cortical, responsable de una inhibición defensiva que repercute en trastornos de la memoria y otras capacidades cognitivas, así como en una alteración en la dinámica de la actividad.20-22
Se entiende por capacidad de trabajo la potencialidad del cerebro de conservar una forma de actividad elaborada en condiciones concretas, por ende, debe medirse por el grado en que varíen los indicadores de la actividad nerviosa superior.19
Un análisis detallado sobre las consecuencias de la interrelación entre el hombre y su actividad laboral nos lleva a la consideración de los efectos negativos y positivos que resultan del desempeño de una tarea concreta. Sin negar la importancia que representa para la promoción de la salud en el trabajo los efectos positivos, se hará énfasis en los efectos negativos. Estos efectos: estrés, monotonía, fatiga, se manifiestan durante y después del trabajo, lo que representa un resultado negativo o al menos no deseado de la actividad laboral, sus manifestaciones se expresan en los diferentes estados funcionales.20
En el ambiente laboral se usa frecuentemente la denominación de estrés ocupa-cional para particularizar una serie de factores negativos al proceso de trabajo y un cierto estado desagradable o no confortable en el hombre.23 Surge como una necesidad histórica de la ciencia de la salud para intentar explicar numerosos mecanismos del organismo humano y  las consecuencias de sus desajustes o desequilibrios.
En general, el término estrés es el más frecuentemente designado para señalar los efectos de cualquier actividad, ya sea en la vida laboral o fuera de esta o para señalar las causas o condiciones que son responsables del deterioro funcional del hombre y de su baja capacidad psíquica de trabajo.24
En múltiples estudios se han definido gran número de posibles factores de estrés presentes en el medio laboral. Entre ellos figuran el trabajo por turnos, la utilización insuficiente de la capacidad, el trabajo insuficiente y el aburrimiento, el trabajo excesivo, el conflicto de funciones, la desigualdad de salarios, las dudas sobre el porvenir profesional, las relaciones laborales, la calidad del material y el peligro físico.25-28
En investigaciones realizadas acerca del estrés laboral se ha demostrado que el trabajo por turnos es un factor de estrés profesional habitual que influye en los ritmos neurofisiológicos, en la temperatura corporal, la eficiencia mental, el índice metabólico, la concentración de azúcar en sangre y  la  motivación profesional, que puede dar lugar a enfermedades  relacionadas con el estrés.24,25
El control del tráfico aéreo es una profesión sometida a un estrés intenso, en un grupo de controladores se observó que la hipertensión era 4 veces más frecuente que en el grupo control compuesto por personal aeronáutico auxiliar.27
El trabajo puede considerarse excesivo cuantitativamente, cuando hay demasiado que hacer, o cualitativamente, cuando es demasiado difícil.27 Se ha demostrado que existe una relación entre una cantidad excesiva de trabajo y el hábito de fumar, siendo un importante factor de riesgo de padecer cardiopatías coronarias. En un estudio realizado a 1 500 empleados se determinó que el trabajo excesivo iba unido a síntomas relacionados con el estrés, como el descenso de la autoestima, la baja motivación profesional y la bebida con fines de evasión.29-32 El trabajo insuficiente, cuando va unido a un ambiente laboral reiterativo, rutinario, aburrido se asocia con la mala salud.29 Por otra parte, el aburrimiento y la falta de interés en el trabajo pueden reducir la capacidad para reaccionar ante una situación anormal.33
Se ha confirmado que la función que la persona desempeña en su trabajo es una fuente importante de estrés profesional;  los factores de estrés institucionales resultantes de la ambigüedad y el conflicto de funciones pueden dar lugar a enfermedades relacionadas con el estrés como las cardiopatías coronarias.33-37 Se ha enfatizado por diversos autores que los ejecutivos, empleados administrativos y profesionales son más propensos al tipo de estrés relacionado con el conflicto de funciones. 38 En este caso la personalidad sería un elemento importante para determinar la reacción del individuo ante esta situación, la tensión resultante es mayor en los introvertidos que en los extrovertidos, y se ha afirmado que en situación de conflicto las personas flexibles muestran mayor tensión que los individuos rígidos.35-38 El hecho de ser responsable de otros trabajadores y de su seguridad parece ser un posible factor de estrés profesional. Las presiones a que están sometidos los operadores de centrales nucleares se definieron al afrontar situaciones anormales. Este tipo de responsabilidad se consideró también en el caso de policías, aunque no en la misma medida.29,31,34 Se observó que una mayor participación daba lugar a una productividad más alta, un mejor rendimiento y niveles más bajos de trastornos físicos y mentales, incluidos los comportamientos relacionados con el estrés como la bebida con fines de evasión y el tabaquismo.38

Conclusiones

En este trabajo relacionado con las fuentes del estrés profesional, la atención se ha centrado en el estrés en múltiples dimensiones y facetas, que solo pueden comprenderse totalmente si se realiza un examen exhaustivo de todas las esferas sociales y físicas en que se desarrolla la vida del individuo. El estrés, la salud, el rendimiento laboral, la familia y la red social, constituyen un conjunto integrado y es una de las preocupaciones de la salud pública actual.

Summary

Occupational health or occupational hygiene is aimed at promoting and maintain the highest degree of physical, mental and social well-being of workers in every profession. In the bibliographic review it is observed how the psychological conflicts and the inadaptation of man to work can generate negative states of mind, emotional unbalances and other malaises affecting not only mental health, but also the neurovegetative functioning of the organism. That's why occupational stress is one of the problems related to the health-disease binomy that has called the attention of researchers in the last 20 years. Working is one of the most useful sources of psychological and social well-being for human beings and provides most of the meaning and structure of the adult, as many authors assert. In the investigations, it is stressed the duality of its effects on health and well-being. This paper allows to deal with new criteria on the psychosocial factors intervening in the working area and its impact on the worker's health, and to search for new diagnostic tools for the future.
Subject headings: OCCUPATIONAL HEALTH; STRESS, PSYCHOLOGICAL; WORKING CONDITIONS; HEALTH DISEASE PROCESS.

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Los factores de riesgo en el proceso salud-enfermedad

Los factores de riesgo en el proceso salud-enfermedad

Resumen

Sobre el fundamento filosófico de los conceptos de la Dialéctica Materialista, se presenta un análisis en relación con la influencia de los "Factores de riesgo" en el "Proceso Salud-Enfermedad", proceso que a su vez se valora desde los puntos de vista teórico y práctico.
Descriptores DeCS: PROCESO SALUD-ENFERMEDAD; FACTORES DE RIESGO; ESTADO DE SALUD; ESTILO DE VIDA.
Las buenas condiciones económicas y sociales mejoran el estado de salud, y el buen estado de salud mejora la productividad en todos los sentidos.1
Las investigaciones modernas han evidenciado que el mejoramiento de la salud poblacional, en cualquier sociedad, se ve determinado por la influencia genética, el estado biológico y la forma en que viven las personas y la sociedad misma, el estado del medio ambiente y la disponibilidad de los servicios de salud.
Los servicios de salud han aumentado su cobertura y mejorado notablemente en organización y calidad. Ciertas iniciativas basadas en un "enfoque de riesgo", combinan acciones curativas tradicionales con otras de tipo preventivo y de promoción de salud. A la combinación coherente y sistemática de estos 2 enfoques se suma la reorientación de los servicios de salud que ya cobra relevancia en la literatura internacional en el campo de la salud pública.2,3
 

Desarrollo

"Ningún ser humano tiene deseo real de envejecer. Tampoco hay ningún ser racional capaz de contemplar con ecuanimidad la decadencia gradual de su eficiencia física y nadie puede permanecer impávido ante el deterioro progresivo de su apariencia física, mientras la naturaleza grava en ellas sus crudas marcas de la edad"(...) (Conferencia "Inmunidad y Longevidad", impartida y distribuida por Peter Rothschild MD PHD (Ensayo presentado en el Congreso de la Sociedad Cubana de Geriatría y Gerontología. Habana. Cuba. 1994)).
¿Cómo entender que un bebé que nació con su piel suave y rosada, su pelo negro, sus vasos sanguíneos elásticos y su sangre fluida, y que en el transcurso de los años, alcanzó su máximo desarrollo físico y mental, llegue a ser finalmente un anciano, canoso, arrugado, de vasos sanguíneos rígidos y obstruidos y deteriorado física y mentalmente?
¿Por qué ante situaciones similares unos enferman y otros no?, o teniendo iguales situaciones patológicas, ¿unos se complican y otros no? ¿Por qué unos viven una vida prolongada, sana y feliz, mientras que otros ven frustradas sus expectativas en este mundo por las enfermedades y la muerte?
¿Por qué varían en las distintas zonas geográficas las principales causas de enfermedad y muerte?
Como síntesis de las anteriores interrogantes nos surge la preocupación; ¿qué factores determinan la conservación de la vida y su conservación con salud?
La adecuada interpretación de los Factores de Riesgo, permite al profesional de la salud su enfrentamiento adecuado para lograr la conservación de la salud, pero ¿qué entendemos por Salud y por Enfermedad?
Sería un error concebir una muralla sólida dividiendo los dos terrenos, hoy sabemos que existe un puente por donde cruzan constantemente factores opositores. La complejidad del estado vital que solemos llamar "Salud", se hace patente en la multiplicidad de los criterios con que en la práctica se le define. La idea de la Salud posee una configuración y un contenido en algún modo dependientes del punto de vista del que valora y por tanto una interpretación diversa social e históricamente. Existe un criterio subjetivo, primario, individual, sentimental, según el cual goza de salud quien pueda decir con sinceridad, "me siento sano", ‘¿pero puede decirse que está sano un individuo que a pesar de sentirse bien, tiene una lesión detectable mediante estudio?4 Salud no es sólo ausencia de enfermedad, sino plenitud de capacidades físicas, psíquicas y espirituales que permiten al hombre su inclusión plena en el medio social y natural.5
En la actualidad no existe un consenso para definir el concepto de salud, que ha pasado desde el primario de "ausencia de enfermedad", hasta el emitido por la Organización Mundial de la Salud (OMS), que la concibe como "el pleno bienestar físico, mental y social del individuo". Los romanos hablaban de Salud como condición física, y mental, "Mens Sana In Corpore Sano".6,7
Para afirmar que un individuo está sano es preciso considerar objetivamente 4 condiciones: Morfología: Que no haya alteración macro o microscópica ostensible de la estructura ni realidad material ajena al cuerpo (pie equino, cálculo, agente microbiano). Función: Sus funciones vitales expresadas en cifras valorativas y trazados gráficos se valoran en el rango de la normalidad (pruebas funcionales renales, respiratorias, circulatorias, metabólicas, etc.). Rendimiento Vital: Referido al rendimiento sin fatiga excesiva y sin daño aparente lo que demanda su rol social. Conducta: Referido a su comportamiento adecuado socialmente; es decir, se tiene en cuenta un elemento subjetivo, pero también el objetivo, si ambos coinciden hay salud. Lo que habitualmente llamamos "Salud", es Salud relativa, un ligero desplazamiento hacia la "Enfermedad" que hace que no se esté totalmente sano o totalmente enfermo.4
Sin embargo, hoy día se debaten estos conceptos, ya que excluyen la posibilidad de que existan ancianos sanos, pues los cambios que acompañan al proceso de envejecimiento provocan insuficiencias funcionales en los ancianos, lo que conduce a la disminución de la función orgánica de conjunto; esto entorpece su desenvolvimiento físico y social, lo que hace difícil hablar de "ausencia de enfermedad" o "pleno bienestar", por lo que la Salud de los ancianos se valora como la capacidad de atenderse a sí mismos y desenvolverse en el seno de la familia y la sociedad, lo que se expresa en el desempeño de las actividades del diario vivir.8,9
Por su parte la Enfermedad, considerada por los antiguos como pérdida o erosión del alma, penetración mágica en el cuerpo, depresión por espíritu maligno, etc., fue categorizada por Galeno en el siglo II después de JC como "disposición prenatural del cuerpo por obra de la cual padecen las funciones vitales, producidas por un desorden instantáneo de la naturaleza individual y medianamente causada por una causa externa o primitiva que, actuando sobre un individuo sensible a ella y predispuesto, determina en su cuerpo una modificación anatomofisiológica anormal y más o menos localizada". "No hay Enfermedad sin causa, no hay Enfermedad sin etiología" (se cumple aquí la ley de la causalidad). Se dice sin adición ni innovación, siguiendo las clásicas e imperecederas líneas directrices que hace siglos estableció el pensamiento etiológico de Galeno y en relación con estas causas se define una causa externa (que puede tratarse de un agente microbiano, un tóxico, una insolación, emoción, ingestión excesiva de alimentos, etc.), y una causa interna (relacionada con el sexo, la raza, el tipo constitucional, etc.) que hace posible la acción del agente externo.
Esencia y fenómeno son dos categorías que expresan distintos aspectos de las cosas y fases del conocimiento y distinto nivel de profundidad del objeto. Llegar a conocer la esencia de un fenómeno significa comprender la causa de su surgimiento, las leyes de su existencia, las contradicciones que les son propias, las tendencias de su desarrollo, así como sus propiedades.
El movimiento del pensamiento se dirige del fenómeno a la esencia. Esencia significa importante, determinante, necesario, en el surgimiento del objeto y el fenómeno representa la revelación de la esencia, su forma de manifestarse, la esencia es oculta, invisible, mientras que el fenómeno es superficial, evidente. Se trata pues de 2 requisitos (interno y externo), necesarios para conocer y caracterizar el objeto.10 Términos tales como idiopático, esencial y primario, comunes en la terminología médica, pierden sentido, pues nada existe sin una causa, las causas de las enfermedades son genéticas y ambientales, los factores genéticos determinan susceptibilidad, que explica el por qué entre 2 individuos expuestos de igual modo a la dieta inadecuada o al humo del cigarro, puede aparecer en una de ellas una afección cardíaca y en la otra no.4 Las sensaciones agradables o desagradables que experimenta una persona al fumar marihuana están condicionadas por su herencia genética.11
El proceso Salud-Enfermedad expresa la unidad de lo natural y lo social en el hombre, la contaminación, el miedo, etc., factores de la vida que influyen en la biología humana se reflejan en ese proceso, el cuadro de las principales causas de muerte sufre variaciones por la influencia del medio, hoy es mayor la necesidad de enfocar ambos aspectos (influencia del hombre y la sociedad en el medio natural y a la inversa).10 La "Cumbre de la Tierra", adentrándose en la trama de lo ambiental y lo social, definió que la pobreza, la miseria y las inequidades de los grupos poblacionales son problemas ambientales, tan ambientales como la erosión, la desertificación y la contaminación.12
La dependencia de la sociedad con respecto a la naturaleza crece en la medida en que crecen los objetivos de la civilización (necesidades culturales, estéticas, etc.); sin embargo hoy se habla de "conciencia ecológica", para transformar ideas y costumbres respecto a las condiciones naturales de vida, hoy se combate la explotación desmedida de los recursos naturales (la tala indiscriminada de árboles, los vertederos fluviales de desechos industriales, la hiperurbanización anárquica, la producción industrial de superciudades ocasionando contaminación ambiental, etc.),10 hoy se habla también de desarrollo sostenible y racionalidad ambiental, como conceptos que pretenden enmendar los errores del desarrollo.12 Analizando estos aspectos resulta oportuno traer a la reflexión las palabras con que el Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros de Cuba, Fidel Castro Ruz, inició su discurso en la Conferencia de Naciones Unidas Sobre Medio Ambiente y Desarrollo, celebrada en Brasil, 1992 y conocida también como "Cumbre de Río" o "Cumbre de la Tierra", cuando dijo: "Una importante especie biológica está en riesgo de desaparecer por la rápida y progresiva liquidación de sus condiciones naturales de vida: el hombre" (...) (Periódico GRANMA Ciudad de La Habana, sábado 13 de junio de 1992. "Año 34 de la Revolución". Año 28. No. 119. Referido a la Conferencia de Naciones Unidas Sobre Medio Ambiente y Desarrollo (ECO/92). Brasil 12-14 de junio. 1992).
La relación entre el hombre y su medio social y natural no se ha desarrollado siempre igual. La forma social de movimiento de la materia, es considerada su forma superior de movimiento10 y la historia como recuento del desarrollo nos muestra a partir del análisis de los modos de producción en las diferentes etapas y las relaciones de producción, cómo cada formación socioeconómica ha aportado diversas condiciones para que el hombre desarrolle su vida, determinando así su Modo de Vida, que es una categoría sociológica que refleja formas típicas, estables y repetidas de la actividad vital de las personas y se determina por las características fundamentales de la formación socioeconómicas, el modo de producción (nivel de fuerzas productivas) y el carácter de las relaciones de producción. Es el modo en que los miembros y clases de una sociedad, utilizan y desarrollan las condiciones de vida, condiciones que a su vez determinan y condicionan su "modo de vida". Para su análisis es preciso investigar la propia vida como conjunto de formas de actividad condicionadas socialmente, como son: empleo, ingresos, vivienda, condiciones de trabajo, educación, descanso, recreación, atención a la salud, higiene, atención al medio ambiente, etc. (...) (Folleto "Modo de Vida", emitido por la Facultad de Ciencias Médicas "Calixto García" 1992).
El estado de la vivienda o de las redes infraestructurales de un asentamiento poblacional, la calidad del aire o de las aguas de consumo, la incidencia de conductas delictivas, se tienen en cuenta en los análisis sobre aspectos socioeconómicos de condiciones de vida o de estado de Salud de la población.12
Por su parte cada individuo, como integrante de una sociedad, tendrá su "Modo de Vida" propio, que será su "Estilo de Vida", que representa su carácter activo, la actividad regulada por la psiquis, producto del Modo de Vida. Es un conjunto de motivaciones y necesidades, modos de valoración y actuación adquiridos de la historia personal y la imagen general elaborada del mundo, todos estos aspectos integrados en la personalidad.
Salud y Enfermedad no son polos opuestos, sino diferentes grados de adaptación del organismo frente al medio, los Modos y Estilos de Vida son influidos y a la vez influyen en la actividad del hombre como ser social, por lo tanto los Modos y Estilos de Vida desarrollados por la sociedad y los individuos, influirán positivamente o negativamente como elementos benefactores o perjudiciales (de Riesgo). La salud está pues en dependencia de los hábitos y costumbres que a diario se practican y del resultado de las acciones y los esfuerzos que también durante su vida cada cual hace por cuidarla y mejorarla.
El ser humano necesita a lo largo de su vida de una alimentación adecuada, hábitos de higiene personal en el hogar y en la comunidad, actividad física y descanso para fortalecer y mantener el cuerpo, diversión y afecto para satisfacer necesidades mentales y espirituales, la ausencia de alguno de estos factores provoca daños, en ocasiones irreversibles a la salud del individuo. Por otra parte, las malas condiciones de vida, las condiciones nocivas de trabajo, el alto grado de urbanización, la falta de servicio de salud pública adecuados, así como el hábito de fumar, los malos hábitos alimentarios, el consumo nocivo de alcohol, el sedentarismo, el bajo nivel escolar, el rechazo a medidas sanitarias preventivas y el aislamiento de amigos y familiares, representan "Factores de Riesgo", que actuando continua y gradualmente, influirán negativamente en el Proceso Salud-Enfermedad y si su influencia negativa opositora, supera(es decir: vence, predomina) la acción de los requeridos elementos benefactores, tendremos como resultado nuevas calidades producidas por cambios o transformaciones que expresarán el deterioro progresivo del organismo humano y es por eso que se habla de cambiar o modificar Modos y Estilos de Vida. El personal de la Salud tiene pues la misión de influir en pro de Modos y Estilos de Vida favorables a la conservación de la Salud, deteniendo y contrarrestando el "movimiento" y la consecuente influencia negativa de los "Factores de Riesgo".13
En su surgimiento la medicina clínica ligada a la Enfermedad, sin tener en cuenta entonces aspectos de profilaxis y promoción de Salud, sólo preocupaba la curación, y el alivio y consuelo si ésta no fuese posible, pero esta idea fue superada por la concepción de la medicina como ciencia social, ligada a las tareas de la sociedad y las comunidades y el objetivo de promover salud, prevenir y curar enfermedades y rehabilitar enfermos, comenzó a imponerse.14 Por otra parte el avance científico y tecnológico de la medicina ha sido incapaz de resolver de forma significativa los problemas de Salud colectiva; por ejemplo, si en los países no desarrollados se considera como única alternativa el uso de alta tecnología serían necesarios cuantiosos recursos para tratar mediante diálisis renal un aproximado de 100 nuevos pacientes por millón de habitantes anualmente.15
La evolución biológica del hombre no ha podido mantenerse a la par de su desarrollo tecnológico, afecciones psicológicas, neurológicas, endocrinas e inmunológicas, repercuten de forma alarmante en la maltrecha salud humana (...). La guerra en sí es un enorme problema de salud pública, el siglo xx ha destruido a muchos millones de personas y ha incapacitado a cantidades indecibles por medio de la acción militar y su secuela de hambre y enfermedad.7
Uno de los grandes retos para la ciencia ha sido siempre el envejecimiento; proceso natural, universal, dinámico, continuo e irreversible a través del tiempo, caracterizado por expresar externamente una secuencia de cambios y transformaciones internas como resultado de la interrelación entre factores intrínsecos (genéticos) y extrínsecos(ambientales).
Los datos experimentales testimonian hoy la existencia de un "Programa de Envejecimiento" especial inscripto en el código genético del hombre y por otra parte se señala también la influencia perjudicial de ciertos Estilos de Vida caracterizados por nutrición deficiente, consumo de sustancias tóxicas, estrés, sedentarismo, etc.; y de otros factores ambientales como radiaciones, agentes infecciosos, etc, que provocan alteraciones del equilibrio neuroendocrino trayendo como consecuencia la disminución del número de células de los diversos tejidos (común denominador de los fenómenos de la vejez), es repercusión multiorgánica del daño tisular y el deterioro del mecanismo de información y restauración de órganos afectados, que en conjunto contribuyen al desgaste de los sistemas orgánicos. Pero la ciencia no ha encontrado un método efectivo para invertir a voluntad el reloj biológico de la senectud, reparar definitivamente los daños causados por ella y restaurar el vigor físico y mental de los envejecidos (...).16,17
La biología molecular ha experimentado enormes adelantos en la comprensión de la base genética de las enfermedades, pero esta relevancia puede ser restringida si se centra la atención en el estudio aislado de sus mecanismos, y al contrario puede ser engrandecida con las interacciones entre susceptibilidad genética e influencia ambiental, pues el Proceso Salud-Enfermedad es la consecuencia a biopsicosocial de la influencia genética y ambiental de cada persona con susceptibilidad propia específica (...).13,15,18
Una aseveración importante como conclusión sería esta expresada por Geofreg Rose: "Los factores genéticos dominan la susceptibilidad individual a la enfermedad, pero el ambiente y el estilo de vida, dominan la incidencia y la prevalencia".19
El ejercicio de la ciencia médica en cualquier nivel de atención es un arte en el que influye la profesionalidad médica, resulta meritorio aplicar tecnología de avanzada para curar a un enfermo y salvarlo de la enfermedad o la muerte, pero, ¿cuán hermoso es el hecho de detectar la amenaza, anunciar la llegada del peligro, reconocer la señal, el detonante, la alarma, para no llegar a enfermar o a complicarse la Enfermedad y mucho menos a morir? Jean Hamburger dijo: "Puedo imaginar un tiempo en que los trasplantes de órganos no sean necesarios porque se sabrá prevenir o curar la Enfermedad mucho antes de tener necesidad de un trasplante".15
En los últimos años el vertiginoso desarrollo de la Epidemiología fortaleció la tendencia a utilizar el término "Enfoque de Riesgo", para planificar y organizar decisiones colectivas e individuales para la conservación de la Salud. Esta estrategia deriva de los conocimientos sobre los factores determinantes de enfermedades y entre sus propósitos está la conducción a la adopción de medidas apropiadas para evitar los efectos perjudicales de estos factores, se trata en un sentido inverso a la producción del daño, eliminarlo o reducirlo. Si una persona tiene niveles altos de colesterol sérico, o es un gran fumador o tiene alto consumo de sal, es posible reducir sus riesgos de enfermedades cardiovasculares o respiratorias en la medida en que disminuya su exposición a tales "Factores de Riesgo".20 Por ejemplo: Lo que nosotros llamamos Tratamiento No Farmacológico de la Hipertensión Arterial es la acción de Salud curativa, que mediante la reducción de los factores determinantes de la aparición y desarrollo de la Enfermedad, procura la mejoría del enfermo.21
Los "Factores de Riesgo" son universales y omnipresentes. La lucha contra los "Factores de Riesgo" constituye el sentido de nuestra actividad profesional:
Cuando nos enfrentamos a una persona y la interrogamos y procuramos ocupación, nivel escolar, hábitos tóxicos, etc., cuando lo examinamos y detectamos cifras elevadas de presión arterial o aumento anormal de peso o cuando le indicamos exámenes buscando cifras elevadas de glicemia o colesterol en sangre, estamos detectando en esa persona "Factores de Riesgo", o la presencia ya de una nueva calidad negativa o enfermedad.
Cuando hablamos de promoción de Salud y prevención de Enfermedades, estamos estimulando el desarrollo de actitudes en contra de los "Factores de Riesgo", para que su influencia cuantitativa no se convierta en nueva calidad negativa.
Cuando hablamos de Diagnóstico Precoz y Tratamiento Oportuno, estamos tratando de reconocer y controlar los daños causados por los "Factores de Riesgo", antes de que los recursos del organismo y la ciencia médica (como su auxiliadora) sean incapaces de lograrlo.
La investigación que emprendemos tiene la finalidad de detectar o expresar el comportamiento de los "Factores de Riesgo" o sus consecuencias, o de los recursos con que los enfrentamos.
La historia de la ciencia no se satisface con ofrecer conocimientos de lo que sucedió en una época determinada, sino que se propone señalar las nuevas tendencias del desarrollo científico, sus logros, lo que puede y debe alcanzarse de forma perspectiva. La historia de la ciencia está indisolublemente ligada a la historia de la humanidad y esa humanidad necesita paz para desarrollar su ciencia, pero necesita mucho más desarrollar su ciencia para lograr la paz, porque como dijera nuestro Apóstol "José Martí", "Para qué, sino para poner paz entre los hombres, han de ser los adelantos de la ciencia?".22
 

Conclusiones

Los factores opositores procedentes de la naturaleza, la sociedad y del propio organismo humano, al interactuar determinan un estado de equilibrio que llamamos Salud (entendido como estudio de bienestar, asociado a una adefcuada morfología, función, rendimiento y conducta), o de desequilibrio que llamamos Enfermedad (estado defectivo de la Salud, resultado de la interacción entre factores genéticos y ambientales, favorecido por el Modo y Estilo de Vida de las personas).
Los "Factores de Riesgo" son universales y omnipresentes, como también son universales y omnipresentes los esfuerzos del organismo y la ciencia médica por detener o contrarrestar su "movimiento" y evitar que su influencia negativa aparezca, se acumule, supere el oficio de los factores benefactores y originen nuevas cualidades negativas (enfermedades y muerte). Las actividades educativas, diagnósticas, terapéuticas e investigativas que constituyen las tareas de nuestra profesión, representan nuestros esfuerzos por lograr este objetivo, procurando así, la conservación y el mejoramiento de la Salud.
 

Summary

An analysis about the influence of risk factors on the health disease process is made on the basis of the philosophical foundation of the concepts of materialist dialectics. This process is also assessed from the theoretical and practical points of view.
Subject headings: HEALTH-DISEASE PROCESS; RISK FACTORS; HEALTH STATUS; LIFE STYLE.
 

Referencias Bibliográficas

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  21. Pérez Medina T. García Barreto D. Tratamiento no farmacológico de la hipertensión arterial. Parte I. RESUMED 1990;(2-3):165-8.
  22. Lugones Botell M. Martí, la medicina y las ciencias. Rev Cubana Med Gen Integr 1992;8(4):389-92.
Recibido: 1ro de septiembre de 1998. Aprobado: 9 de noviembre de 1998.
Dr. Justo Senado Dumoy. Edificio 38-A. Apto. 3. Zona Micro 10, reparto Alamar, Habana del Este, Ciudad de La Habana, Cuba.
1 Especialista de II Grado en Medicina Interna. Profesor Auxiliar de Medicina Interna de la Facultad "Calixto García".

sábado, 20 de octubre de 2012

Pruebas psicológicas - Mg. Jessica Calizaya


Los Secretos del Lenguaje No Verbal. Completo.


metodos de observacion


¿Es lo mismo mirar, ver y observar?.


EVALUACIÓN PSICOLÓGICA

Una evaluación psicológica es una evaluación efectuado por un profesional de la salud mental como puede ser un psicólogo para determinar el estado de la salud mental de una persona. Una evaluación psicológica puede tener como resultado un diagnóstico de una enfermedad mental. Es el equivalente mental de un examen físico.

Esta evaluación generalmente incluye una entrevista psicológica preliminar para confeccionar la Historia Clínica de la persona, para ello se realiza la recopilación de información trascendente en la anamnesis, también se realiza un estudio del estado mental, afectivo e interaccional del cliente o paciente para tener un acercamiento a la realidad del sujeto a evaluar y comprender empáticamente su marco de referencia, también se estila la aplicación de tests psicológicos que pueden ser tanto psicométricos como proyectivos: Test de Rorschach, Test de Apercepción Temática (T.A.T), tests de inteligencia (cociente intelectual), etc. También puede incluir pruebas neuropsicológicas para evaluar, establecer, localizar y medir alguna irregularidad psico-orgánica. El examen psicológico no es un proceso terapéutico en sí mismo, sino que pretende precisar un diagnóstico, indicar un tratamiento, una psicoterapia o una reeducación neuropsicológica. También puede ser parte de un peritaje de seguros o judicial, sea civil o penal. La evaluación concluye con un informe escrito que deberá poder ser comunicado al paciente quien deberá conocer sus implicancias.

LA HISTORIA CLINICA

Los Trastornos Psicológicos son de difícil detección en la exploración, por lo que aquí, adquiere una gran importancia, la realización de una completa y buena historia clínica psicológica.


I - ANAMNESIS - ENTREVISTA.

CUESTIONARIO previo a la exploración.

Se preguntará por:


¿Estudios realizados?
¿Se olvida de las cosas o de los nombres de las personas?
¿Le cuesta concentrarse?
¿Tiene dificultad para relacionarse con los demás?
Cuando se enfada responde agresividad hacia los demás?
¿Se encuentra a menudo triste sin saber por que o alguna vez ha pensado que no vale la pena seguir viviendo?
¿Nota a menudo sudoración o palpitaciones?
¿Oye o ve cosas que los demás no perciben?
¿Piensa que hablan mal de usted, le envidian o le persigen?
¿Padecece de insomnio o somnolencia diurna?
¿Toma medicamentos?, ¿cuáles?, ¿para qué?, ¿Toma drogas?,¿tipo?, ¿vía de administración?, ¿frecuencia?
¿Le han aconsejado ponerse bajo control médico o psicológico? o ¿esta bajo control médico (psiquiatra) o psicológico?.

II - EXPLORACION PSICOLÓGICA


A. INSPECCIÓN.

Deberemos observar y valorar:

Su conducta y aspecto general.
Su actividad motriz, nivel de vigilancia, orientación témporo-espacial.
Reacciones emocionales, lenguaje, memoria, capacidad intelectual
Contenido del pensamiento (alucinaciones, delirios, etc.)
Si existen signos de intentos de autolisis o de cirugía y traumatismos cráneo-encefálicos.

B. EXPLORACIÓN PSICOMETRIA.

Debemos valorar:

Valoración del Estado Cognitivo.

El estado cognitivo se debería valorar a toda persona de 65 años o más. Existen dos pruebas para efectuar una valoración rápida, como son el MINI-Mental y el Cuestionario de Pfeiffer.


Valoración del Desarrollo Intelectual.

En el caso de las obtenciones se debe preguntar sobre el nivel de estudios que ha realizado y en aquellos casos en los que se intuya un bajo nivel cultural, se deberá valorar a través de la lectura de un texto, su nivel lector y de comprensión del lenguaje escrito.

En aquellos casos en los que se detecte un déficit intelectual se deberá solicitar un informe favorable de un psiquiatra o psicólogo ya que un coeficiente intelectual (CI) entre 50 y 70 se considera apto para conducir si aporta el informe favorable, mientras que los que tengan un retraso mental con (CI) inferior a 50 no se admiten. Para el permiso de armas no se admite ningún tipo de retraso mental.

No obstante existen unas baterías de tests para la valoración del CI : WISC-R y WAIS y otras para la valoración de la inteligencia: Domino D-48 y TIG que pueden ser de utilidad en caso de necesidad.


Valoración de los Trastornos Mentales y de Conducta.

En los casos que declaren o que se sospeche que padecen alguna enfermedad mental o algún trastorno de la personalidad estos deberán aportar un informe favorable de un psiquiatra o psicólogo para poder valorar su capacidad para la conducción.

Ante la duda o sospecha de que el aspirante pueda tener uno de estos trastorno, se pueden recurrir a su valoración mediante la aplicación de pruebas psicológicas, siendo los más significativos: el CAQ que mide (depresión, agitación, paranoia, desviación psicopática, esquizofrenia, psicastenia, hipocondría, etc.), EPI que mide (neuroticismo y extroversión), 16PF que mide 16 dimensiones de la personalidad (entre ellos hipocondría)

En el caso de los permisos de armas es de obligatoriedad el estudio de los trastornos de personalidad mediante pruebas que valoren prioritariamente: Neuroticismo, paranoia, agitación, fuerza del yo y complementariamente también, psicastenia y hipocondría. Existe el test de escala de la personalidad "EAE" de EOS que mide neuroticismo, paranoia, agitación y fuerza del yo, y la psicastenia y la hipocondría la mide el CAQ. En el caso de que sea preciso se puede complementar pasando el CAQ, EPI o 16PF.


Valoración de las Aptitudes Perceptivo – Motoras.


Descartar los Trastornos relacionados con SUSTANCIAS.

ENTREVISTA A UN PSICOLOGO CLINICO

domingo, 14 de octubre de 2012

SALUD MENTAL Y NEUROCIENCIAS

Salud (del latín "salus, -ūtis") es el estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de infecciones o enfermedades ligeras, fuertes o graves, según la definición de la Organización Mundial de la Salud realizada en su constitución de 1946. También puede definirse como el nivel de eficacia funcional o metabólica de un organismo tanto a nivel micro (celular) como en el macro (social). El concepto salud abarca el estado biopsicosocial, los aspectos que un individuo desempeña. En 1992 un investigador agregó a la definición de la OMS: "y en armonía con el medio ambiente", ampliando así el concepto.

"La salud se mide por el shock que una persona pueda recibir sin comprometer su sistema de vida. Así, el sistema de vida se convierte en criterio de salud. "una persona sana es aquella que puede vivir sus sueños no confesados plenamente"...
"La salud es principalmente una medida de la capacidad de cada persona de hacer o convertirse en lo que quiere ser."...
"La salud es el equilibrio dinámico de los factores de riesgo entre el medio y dentro de ciertos parámetros."...
La forma física es la capacidad que tiene el cuerpo para realizar cualquier tipo de ejercicio donde muestra que tiene resistencia, fuerza, agilidad, habilidad, subordinación, coordinación y flexibilidad.
Existe también la salud mental, la cual se caracteriza por el equilibrado estado psíquico de una persona y su autoaceptación (gracias al autoaprendizaje y autoconocimiento); en palabras clínicas, es la ausencia de cualquier tipo de enfermedad mental.